viernes, 28 de junio de 2013

La soledad más ruidosa

Foto de We heart it
¡Hola, ángeles! ¡Rose is back. :)!
Aunque lamento notificarles que mi estado (social, mental, etc) sigue igual (¡Buhh!).

Lo único que cambió es que ahora estoy en vacaciones y soy, oficialmente, de último año. ¡Un hurra para mí! Amo el verano, creo que es mi época favorita del año, y es que ¿a quién no podría gustarle? creo que es la estación donde todos los adolescentes viven sus momentos más dramáticos, donde comienzan nuevas aventuras y conocen lo que llamamos el 'amor de verano', xd. 

Sin embargo, hay algunas personas que no pasan esta época como en las películas. Por ejemplo: Yo.

Como he mencionado antes, amo el verano pero éste no pinta nada bien. Dejen que me explique mejor: Tengo tres tías que son muy buenas personas, pero son unas perras cuando de mí se trata, y mi mamá cambia totalmente su personalidad cuando ellas están alrededor. Tengo casi una semana en su casa porque la bebé (Es una ternurita. No sacó nada de ellas) va a celebrar su primer cumpleaños, y yo las iba a ayudar con los preparativos, armaríamos todo y ¡voilá! la fiesta perfecta. 

Por lo menos eso fue lo que imaginé al principio. En fin, desde que llegué acá el trío se ha portado de la patada conmigo; pero la razón por la que estoy tan molesta es que han estado hablándole mal a mi mamá de mí. ¡Como si mi relación con ella no estuviera pendiendo de un hilo! Así que decidí ignorarlo, porque si hacía una escenita de las mías, mi madre me castigaría de por vida y no me dejaría ir a un viaje a la ciudad con unas compañeras de aula. No las llamaría exactamente 'amigas' porque yo tengo una historia con ellas, por tanto, he decido ignorar el cuentito y tragarme mis comentarios poco agradables con ellas (últimamente me ha funcionado eso) y aprovechar este escape temporario.

Por cierto, ¿se acuerdan de la tía que tenía pero que no era exactamente pariente genético mío? bueno, para darle más picante a la situación, ¡ella está aquí! sin mencionar que una amiga de ellas vino con su hijo, y contando a los esposos de cada una y a los entrometidos vecinos somos dieciséis personas (contando a los niños, que carecen de tranquilidad) en la casa preparando todo y haciendo comentarios agrios y típicos de esas arpías sobre lo que sea que las rodee, muchos de ellos me los gano yo. Así que pueden imaginarse: dieciséis personalidades completamente diferentes, todos discutiendo al mismo tiempo... Una inmediata migraña.

Pero estoy sola. Estoy sentada en el porche de una casa ajena porque no tengo un lugar donde estar, porque puedo estar en el techo y a nadie le importaría, porque incluso mis sobrinos (primos) quieren más a Frankie (el plomero, cerrajero, etc) que a mí que daría mi vida por ellos, sin duda alguna.

Cielos, no es fácil tratar de no llorar cuando ¡el maldito vecino pone todas las canciones tristes habidas y por haber! y antes me caía bien porque ponía rock.
 Esto les puede parecer gracioso, incluso si estuviera en otra parte puede que soltara una carcajada de maniáticos, pero es que de verdad estoy triste. Trato de que no se note pero es tan difícil.

Sé que hay otra gente que lleva una vida peor, lo sé, pero eso no significa que no me sienta triste por el desprecio de mi propia familia para conmigo.

Pero trataré de ignorarlo si quiero ir al viaje mañana.

Son las 8:41 de la noche. Faltan 54 días para CoB (Película basada en mi libro favorito City of Bones) y deseo con ansias monumentales que haya alguien que me lea y se apiade de mí. Porque esto no es ficticio, ¡esto es jodidamente real!

Nos vemos mañana y les pido que no me dejen de leer... <3

Con amor,

Rose

A continuación les dejo una canción que he escuchado últimamente y habla sobre ser jóvenes.